Creo que para hablar de esta antología es necesario un prólogo y la persona que lo haga puede describir mejor la narrativa de la misma. Me gustaría decir unas pocas palabras de los tres textos desarrollados aquí. 

En los dos primeros hablo de la amistad con sus cosas buenas y malas como todo en la vida, los códigos, las reglas, el cariño, el acompañamiento, los silencios, las traiciones, y la vida misma con sus vicisitudes. Los chicos del puente  tiene un personaje principal ambiguo, querible y a la vez que se manda macanas; la ausencia de uno de sus amigos es una presencia fantasmal y la relación entre el círculo de ellos marca el devenir de sus vidas. Reencuentro con amigos lo dice el título en sí mismo y ahonda en cómo es ese reencuentro entre ellos ¿Son las mismas personas que en esa época o cambian? ¿Queda algo de la esencia? La novedad que usé en el relato es un diálogo en WhatsApp que habla un poco de la incomunicación de la época y cómo un suceso peculiar puede transformarse en una bola de nieve.

La chica de los peinados es una ficción de un femicidio que surgió a partir de ciertos crímenes en los últimos años en Ensenada, Berisso y La Plata, que habla principalmente sobre los últimos momentos de la víctima, ciertas conjeturas sobre el caso, lo que siente la familia, que la perdió, el miedo mismo en su estado más puro; y a la vez, en su aspecto secundario, es una historia de cómo fue el trabajo para escribir el relato, como si fuera una especie de arcilla y le diera forma su presencia bien marcada en la otra historia.

 

Autor:

Gonzalo Taylor

Gonzalo Taylor empezó a escribir, en un Taller de Escritura en su ciudad natal, hace una década, casi al unísono con el nacimiento de su hija. Procedente del ámbito de las Ciencias Exactas, de la Ingeniería Química y de los profesorados en Química, Prácticas y Medio Ambiente, hay algo de esa estructura en su narrativa y en la mezcla heterogénea de sus relatos. También la impronta de su familia y amigos está presente en sus historias.

Como la Química, que es el estudio del cambio, no es la misma persona que cuando comenzó a escribir. Su virtud más grande está en saber de qué tema se está hablando en sus cuentos. 

Maneja bien los personajes, los tiempos y la escenografía; sin embargo, se demora en armar ciertas frases y necesita corregir hasta el hartazgo para embellecer el texto, algo que hace con mucha dedicación.

Gonzalo escribe como catarsis, para poner en palabras lo importante y sean más tolerables que la realidad. 

Nadie murió en las vísperas

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Creo que para hablar de esta antología es necesario un prólogo y la persona que lo haga puede describir mejor la narrativa de la misma. Me gustaría decir unas pocas palabras de los tres textos desarrollados aquí. 

En los dos primeros hablo de la amistad con sus cosas buenas y malas como todo en la vida, los códigos, las reglas, el cariño, el acompañamiento, los silencios, las traiciones, y la vida misma con sus vicisitudes. Los chicos del puente  tiene un personaje principal ambiguo, querible y a la vez que se manda macanas; la ausencia de uno de sus amigos es una presencia fantasmal y la relación entre el círculo de ellos marca el devenir de sus vidas. Reencuentro con amigos lo dice el título en sí mismo y ahonda en cómo es ese reencuentro entre ellos ¿Son las mismas personas que en esa época o cambian? ¿Queda algo de la esencia? La novedad que usé en el relato es un diálogo en WhatsApp que habla un poco de la incomunicación de la época y cómo un suceso peculiar puede transformarse en una bola de nieve.

La chica de los peinados es una ficción de un femicidio que surgió a partir de ciertos crímenes en los últimos años en Ensenada, Berisso y La Plata, que habla principalmente sobre los últimos momentos de la víctima, ciertas conjeturas sobre el caso, lo que siente la familia, que la perdió, el miedo mismo en su estado más puro; y a la vez, en su aspecto secundario, es una historia de cómo fue el trabajo para escribir el relato, como si fuera una especie de arcilla y le diera forma su presencia bien marcada en la otra historia.

 

Autor:

Gonzalo Taylor

Gonzalo Taylor empezó a escribir, en un Taller de Escritura en su ciudad natal, hace una década, casi al unísono con el nacimiento de su hija. Procedente del ámbito de las Ciencias Exactas, de la Ingeniería Química y de los profesorados en Química, Prácticas y Medio Ambiente, hay algo de esa estructura en su narrativa y en la mezcla heterogénea de sus relatos. También la impronta de su familia y amigos está presente en sus historias.

Como la Química, que es el estudio del cambio, no es la misma persona que cuando comenzó a escribir. Su virtud más grande está en saber de qué tema se está hablando en sus cuentos. 

Maneja bien los personajes, los tiempos y la escenografía; sin embargo, se demora en armar ciertas frases y necesita corregir hasta el hartazgo para embellecer el texto, algo que hace con mucha dedicación.

Gonzalo escribe como catarsis, para poner en palabras lo importante y sean más tolerables que la realidad.